Lejos de eclipsar el rol de John Constantine en el destino de lo mágico y oscuro en el Universo DC, La Guerra de la Trinidad ha contribuido a encumbrarlo no solo como sortílego o héroe, sino como líder capaz de superar sus demonios personales y del pasado –algunos son figurados, otros son bien tangibles–, de dirigir a un grupo por variopinto que este sea y de enfrentarse a todas las amenazas para ayudar a sus compañeros. La magnitud de los acontecimientos no le ha arredrado y pese a verse rodeado de personajes ultraterrenos como el Fantasma Errante o Pandora, Constantine continúa cargando con su rol de protector de lo mágico.
No será Constantine el único en cambiar durante el transcurso de La Trinidad del Pecado: precisamente si algo caracteriza esta clase de eventos, tan vastos que abarcan varias colecciones, es que rara vez dejan las cosas tal y como estaban. Villanos que descubren que siempre tuvieron el poder de hacer algo realmente devastador; héroes que asumen identidades nuevas cuando todo parece perdido; bajas que lucirán tal vez para siempre las cicatrices del conflicto. Si algo podemos dar por seguro es que las precarias situaciones de muchos de los personajes implicados van a verse todavía más zarandeadas.
Las referencias visuales a Crisis en Tierras Infinitas y Crisis Final no son gratuitas: hay un motivo para que Pandora haya decidido tomar cartas en el conflicto, para que el Fantasma Errante se haya visto arrastrado a una disputa que no era la suya, para que John Constantine decida arriesgar la piel contra poderes que bien podrían ser más de lo que puede tragar. Se está librando una guerra y la Liga de la Justicia Oscura va a sufrir sus consecuencias. Cómo se desarrollará y qué será de quienes participan en ella es algo que descubriréis en estas páginas.
Alberto Morán Roa
Artículo publicado originalmente como introducción de Liga de la Justicia Oscura núm. 8.
No será Constantine el único en cambiar durante el transcurso de La Trinidad del Pecado: precisamente si algo caracteriza esta clase de eventos, tan vastos que abarcan varias colecciones, es que rara vez dejan las cosas tal y como estaban. Villanos que descubren que siempre tuvieron el poder de hacer algo realmente devastador; héroes que asumen identidades nuevas cuando todo parece perdido; bajas que lucirán tal vez para siempre las cicatrices del conflicto. Si algo podemos dar por seguro es que las precarias situaciones de muchos de los personajes implicados van a verse todavía más zarandeadas.
Las referencias visuales a Crisis en Tierras Infinitas y Crisis Final no son gratuitas: hay un motivo para que Pandora haya decidido tomar cartas en el conflicto, para que el Fantasma Errante se haya visto arrastrado a una disputa que no era la suya, para que John Constantine decida arriesgar la piel contra poderes que bien podrían ser más de lo que puede tragar. Se está librando una guerra y la Liga de la Justicia Oscura va a sufrir sus consecuencias. Cómo se desarrollará y qué será de quienes participan en ella es algo que descubriréis en estas páginas.
Alberto Morán Roa
Artículo publicado originalmente como introducción de Liga de la Justicia Oscura núm. 8.