Eccediciones

Objetivo: El multialienígena

El cuaderno del mes pasado terminó con la violenta llegada de Mon-El de la Legión de Superhéroes, un suceso que marca el principio de La saga de Infinitus, una trama en la que Jeff Lemire, guionista de la serie original Justice League United, devuelve al primer plano de la actualidad al grupo de aventureros del siglo XXXI. Ya sabemos que tanto Mon-El como sus compañeros han quedado relegados a un discreto segundo plano tras la cancelación de su título en Estados Unidos, cuyo puesto ha ocupado Liga de la Justicia 3000, colección publicada de forma cuatrimestral por ECC Ediciones. No obstante, solo era cuestión de tiempo que los aventureros que empezaron sus andanzas como secundarios de Superboy volvieran a la plaestra y, en este caso, a lo grande.

Creados por Otto Binder y Al Plastino en Adventure Comics núm. 247 (1958), los legionarios se ganaron de inmediato el corazón de los lectores de la época. No en vano, eran adolescentes con superpoderes de lo más variopinto que procedían de pintorescos rincones de la galaxia en una época de auge de los cómics de ciencia ficción. Al trío original formado por Saturn Girl, Cósmico y Relámpago, se unieron otros personajes con habilidades asombrosas y orígenes que despertaban la imaginación de autores y lectores. No es de extrañar que, tras diversas apariciones puntuales, obtuvieran un serial propio y, más adelante, diversas colecciones propias a las que debemos etapas tan memorables como la realizada por Paul Levitz, Keith Giffen, Steve Lightle y Greg LaRocque en los años ochenta. Para entonces, aquellos jovenzuelos ya habían crecido y contaban con un rico contexto propio que los convertía en un microuniverso dentro de la magnitud de las publicaciones de DC Comics. Y aunque las circunstancias de Superboy, Supergirl y Superman, que habían sido su inspiración y también su vínculo palpable con el presente del Universo DC, provocaran cambios de continuidad que confundieron a propios y extraños, el nutrido equipo siguió presente en kioscos y librerías hasta hace apenas unos meses, cuando se produjo la mencionada cancelación en Estados Unidos.

Como ya pudimos intuir en esa última página del número anterior, el objetivo de Mon-El y, por extensión, del resto de la Legión de Superhéroes, es el pequeño Ultra, el Multialienígena, que ya es un secundario imprescindible de las aventuras de la Liga de la Justicia Unida. No obstante, el muchacho es una actualización de un concepto ya conocido por los seguidores más veteranos de DC. El debut del personaje original se produjo en 1965, en plena Edad de Plata, en las páginas de Mystery in Space núm. 103, la antología que albergaba las andanzas de, entre otros, Adam Strange, que también forma parte de esta Liga de la Justicia afincada en Canadá aunque, eso sí, tenga que compaginar su tiempo con estancias forzosas en el remoto mundo llamado Rann. Creado por Dave Wood y Lee Elias, el Ultra original era un astronauta terrícola cuya nave se estrellaba en un planeta donde sufría el ataque de cuatro alienígenas de sendas especies. Todos le dispararon rayos que pretendían convertirlo en uno de los suyos y lo hicieron simultáneamente, lo cual tuvo una curiosa consecuencia. Así, el cuerpo de Ace Arn se dividía en cuatro partes, cada una de las cuales contaba con el aspecto y los poderes de las razas agresoras. Fue entonces cuando nació Ultra, cuyo nombre incluía las iniciales de los planetas de cada especie (Ulla, Laroo, Trago y Raagan) y la “a” inicial del nombre terrícola del accidentado.

Con fuerza sobrehumana, la habilidad de repeler la materia y generar electricidad, y también con el socorrido poder de volar, Ultra vivió numerosas aventuras dentro de aquella publicación y como acompañante de otros personajes hasta que llegó Crisis en Tierras Infinitas y modificó ciertas partes de su origen. En todo caso, los cambios no tuvieron demasiada trascendencia en un personaje que había pasado a ser más que secundario. Eso sí, no fueron pocos los guionistas que se acordaron de su existencia, desde el mismísimo Grant Morrison en su etapa de Animal Man hasta James Robinson, que contó con él para su celebérrima Starman, hito indiscutible del cómic de superhéroes de los años noventa. Incluso apareció en Crisis Infinita formando parte del escuadrón de héroes reclutados por Donna Troy.

Ahora, como ya sabemos, Ultra es el fruto de un arriesgado experimento que los sabios del planeta Rann han llevado a cabo en colaboración con otras razas de su sistema estelar para que se convierta en el símbolo de una paz que no parece llegar nunca. Byth, villano principal de las aventuras de la Liga de la Justicia Unida, parece muy interesado en él desde el principio y, de hecho, intentó tenerlo dominado y atado en corto para llevar a término unos planes de los que sabemos más en este cuaderno, acaparado en su totalidad por el primer episodio anual de Justice League United. Por supuesto, la trifulca con la Legión de Superhéroes y Byth continuará... igual que cierta epidemia que ha empezado a extenderse por Metropolis.

Fran San Rafael

Artículo publicado originalmente en las páginas de Liga de la Justicia núm. 36.