Es curioso que James Robinson concluya su andadura en JLA con una reflexión de lo que podría haber sido. Sus ideas sobre el futuro de la Liga de la Justicia de América son extremadamente espectaculares y es una lástima que no se desarrollen en todo su esplendor, pero DC Comics va a relanzar por completo su universo superheroico y eso supone dejar atrás el actual elenco de JLA. El futuro no pertenece a Robinson, sino a sus sucesores. Hay que olvidar lo antiguo y dejar paso a lo nuevo. Y entre las novedades nos encontramos a los que posiblemente sean los nombres más importantes en el mundo del cómic estadounidense actual: Geoff Johns y Jim Lee. Efectivamente, la próxima cabecera de la Liga de la Justicia de América va a estar guionizada por el hombre que ideó éxitos tan sonados como los relanzamientos de Green Lantern, Flash o Jóvenes Titanes, o sagas tan épicas como Crisis Infinita, La noche más oscura o El día más brillante. ¿Es necesario decir que la espectacularidad está garantizada? Desde luego que no, sobre todo si tenemos en cuenta que lo acompañará el artista que ha dibujado algunos de los tebeos más vendidos de los últimos años: Batman: Silencio, Superman: Por el mañana y All Star: Batman y Robin.
Llegados a este punto, debemos agradecer a James Robinson que nos haya regalado unos episodios tan brillantes y, sobre todo, que su último guión evoque un sentimiento de cierre. Así podemos despedirnos con naturalidad de los problemas entre Red Tornado y Amazo, o de las ansias de destrucción del Sindicato del Crimen y del Corazón Estelar. Todas las aventuras de la Liga de la Justicia quedarán grabadas en nuestra memoria para siempre, pero ahora debemos dejar espacio para algo que cambiará la manera en que vemos el Universo DC. Y es que lo que nos depara el futuro es tan sensacional que prácticamente no se puede hablar de ello para no destripar sorpresas. Solo os puedo comentar que el primer arco de la nueva cabecera de la Liga de la Justicia de América redefine por completo un origen que se ha mantenido casi intacto durante 50 años. Se trata de una actualización tan asombrosa como necesaria, porque este relanzamiento pretende acercar el Universo DC a las nuevas generaciones y, de esta manera, llamar la atención de nuevos lectores. Con todo esto en mente, solo podemos despedir el cómic que tienes entre manos evocando una expresión clásica: La Liga de la Justicia ha muerto... ¡larga vida a la nueva Liga de la Justicia!
Enrique Ríos
Artículo incluido en el volumen JLA núm. 6: La ascensión de Eclipso
Llegados a este punto, debemos agradecer a James Robinson que nos haya regalado unos episodios tan brillantes y, sobre todo, que su último guión evoque un sentimiento de cierre. Así podemos despedirnos con naturalidad de los problemas entre Red Tornado y Amazo, o de las ansias de destrucción del Sindicato del Crimen y del Corazón Estelar. Todas las aventuras de la Liga de la Justicia quedarán grabadas en nuestra memoria para siempre, pero ahora debemos dejar espacio para algo que cambiará la manera en que vemos el Universo DC. Y es que lo que nos depara el futuro es tan sensacional que prácticamente no se puede hablar de ello para no destripar sorpresas. Solo os puedo comentar que el primer arco de la nueva cabecera de la Liga de la Justicia de América redefine por completo un origen que se ha mantenido casi intacto durante 50 años. Se trata de una actualización tan asombrosa como necesaria, porque este relanzamiento pretende acercar el Universo DC a las nuevas generaciones y, de esta manera, llamar la atención de nuevos lectores. Con todo esto en mente, solo podemos despedir el cómic que tienes entre manos evocando una expresión clásica: La Liga de la Justicia ha muerto... ¡larga vida a la nueva Liga de la Justicia!
Enrique Ríos
Artículo incluido en el volumen JLA núm. 6: La ascensión de Eclipso