Corría el año 1995, y Wonder Woman acababa de salir de una época convulsa. No para su serie, que había experimentado un gran momento con el guionista William Messner-Loebs y el dibujante Mike Deodato Jr., sino para el personaje, que había perdido su puesto de campeona de las amazonas en favor de su “hermana” Artemisa, en lo que fuera un ardid orquestado por la reina Hipólita. Y sus motivos tenía, como bien sabrán quienes hayan leído el reciente volumen El torneo que ha publicado ECC Ediciones.
El periplo de una Wonder Woman desposeída había sido la respuesta de DC Comics a situaciones parecidas que ya habían experimentado durante los años anteriores personajes como Superman, Batman o Green Lantern. La década de los noventa, caracterizada por el predominio de héroes menos tradicionales, parecía el terreno más apropiado para las aventuras de Artemisa, pero solo era cuestión de tiempo que Diana recuperase el “trono” que siempre había ocupado. Y para esto fue esencial la participación del guionista y dibujante John Byrne (Reino Unido, 1950). Durante la década anterior, este autor había sido una de las principales estrellas del medio gracias a series de Marvel Comics como The Uncanny X-Men, Los Cuatro Fantásticos o Alpha Flight, y también había sentado las sólidas bases del mismísimo Hombre de Acero después de Crisis en Tierras Infinitas. En 1995, cuando tomó las riendas de Wonder Woman, la estrella de Byrne aún estaba lejos de apagarse, y demostró durante tres años que tenía mucho que contar sobre la amazona.
La primera medida del británico fue dar al personaje un nuevo punto de partida, esa “segunda génesis” que sirve como título al presente volumen. Como en tantas otras ocasiones, Byrne se las arregló para que cualquier lector pudiera subirse al carro aunque jamás hubiera leído ni un solo número. Enseguida veremos que el autor no tarda en situar a Diana en un nuevo hogar (la ficticia Gateway City, en detrimento de la habitual Boston) ni en crearle un nuevo elenco de secundarios encabezado por la joven y prometedora Cassie Sandsmark. Y como ya hiciera durante su estancia en Superman y Action Comics, recurre al legado de Jack Kirby. Así pues, los villanos iniciales son los habitantes de Apokolips, liderados por cierto señor llamado Darkseid, pero no tarda en aparecer un demonio muy conocido por los seguidores del Universo DC. Y por supuesto, aquí, en lo que supone otro homenaje a Kirby, no habla en verso.
Fran San Rafael
Artículo publicado en el tomo Grandes autores de Wonder Woman: John Byrne - Segunda génesis ¡Ya a la venta en tu librería favorita!
Previa de Grandes autores de Wonder Woman: John Byrne - Segunda génesis
El periplo de una Wonder Woman desposeída había sido la respuesta de DC Comics a situaciones parecidas que ya habían experimentado durante los años anteriores personajes como Superman, Batman o Green Lantern. La década de los noventa, caracterizada por el predominio de héroes menos tradicionales, parecía el terreno más apropiado para las aventuras de Artemisa, pero solo era cuestión de tiempo que Diana recuperase el “trono” que siempre había ocupado. Y para esto fue esencial la participación del guionista y dibujante John Byrne (Reino Unido, 1950). Durante la década anterior, este autor había sido una de las principales estrellas del medio gracias a series de Marvel Comics como The Uncanny X-Men, Los Cuatro Fantásticos o Alpha Flight, y también había sentado las sólidas bases del mismísimo Hombre de Acero después de Crisis en Tierras Infinitas. En 1995, cuando tomó las riendas de Wonder Woman, la estrella de Byrne aún estaba lejos de apagarse, y demostró durante tres años que tenía mucho que contar sobre la amazona.
La primera medida del británico fue dar al personaje un nuevo punto de partida, esa “segunda génesis” que sirve como título al presente volumen. Como en tantas otras ocasiones, Byrne se las arregló para que cualquier lector pudiera subirse al carro aunque jamás hubiera leído ni un solo número. Enseguida veremos que el autor no tarda en situar a Diana en un nuevo hogar (la ficticia Gateway City, en detrimento de la habitual Boston) ni en crearle un nuevo elenco de secundarios encabezado por la joven y prometedora Cassie Sandsmark. Y como ya hiciera durante su estancia en Superman y Action Comics, recurre al legado de Jack Kirby. Así pues, los villanos iniciales son los habitantes de Apokolips, liderados por cierto señor llamado Darkseid, pero no tarda en aparecer un demonio muy conocido por los seguidores del Universo DC. Y por supuesto, aquí, en lo que supone otro homenaje a Kirby, no habla en verso.
Fran San Rafael
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