Eccediciones

Entrevista a Sean Murphy

Durante el pasado mes de junio publicamos una obra tan controvertida como original, que ha logrado granjearse críticas realmente positivas; seguramente, Punk Rock Jesus marcará un antes y un después en la carrera profesional de su autor, por muchos señalado como uno de los grandes talentos emergentes del cómic americano. Nos referimos a Sean Murphy (Nashua, New Hampshire; 1980), autor completo de la serie limitada cuyo argumento gira en torno a la emisión del reality show definitivo: crear un clon humano con ADN extraído del Santo Sudario, implantarlo en el útero de una madre adolescente y que esta dé a luz en directo a un niño que podría ser el segundo advenimiento de Jesucristo.

En las líneas que siguen a continuación os ofrecemos la entrevista que amablemente nos concedió el autor, durante la cual comentamos diferentes aspectos relacionados con su carrera y estilo, con el desarrollo de Punk Rock Jesus, y con los proyectos que actualmente le ocupan.

ECC.- Punk Rock Jesus no es tu primera obra como autor completo, ya que en 2005 publicaste Off Road (Oni Press), a medio camino entre la road movie y el slice of life. Pero durante este tiempo has protagonizado una espectacular progresión, acumulando una experiencia que seguro ha resultado de gran utilidad a la hora de abordar un proyecto tan extenso y complejo como este. ¿Consideras que, a la larga, el hecho de que el desarrollo de esta obra se haya demorado en el tiempo ha terminado resultando positivo?

Sean Murphy.-
Sí, me alegra que Punk Rock Jesus se retrasara tanto. No solo porque durante ese tiempo pude evolucionar como dibujante y mejorar el guion, sino también porque me permitió madurar como ateo. Si hubiera hecho esta obra hace cinco años, creo que mi "yo" más joven y militante no habría intentado ser tan equilibrado. Y eso es algo que seguramente habría perjudicado al proyecto y propiciado el abandono de numerosos lectores religiosos.

Parte del éxito de este cómic se debe a lo inclusivo que es, porque no pretendía convertir a nadie al ateismo de forma agresiva. Creo que el libro ha sido abrazado por una audiencia mucho mayor. Y si una comprensión del ateismo ha calado en mi audiencia religiosa, o incluso ha animado a que alguno de ellos a cuestionarse temas relacionados con sus propias creencias, entonces habré tenido éxito al más alto nivel. Pero me imagino que eso sería extraño... Sería feliz sabiendo que a la gente simplemente le ha entretenido.

ECC.- Pese a tu juventud, ya has tenido ocasión de colaborar con guionistas tan reputados como Bruce Jones, Jason Aaron, Grant Morrison o Scott Snyder. ¿Ha contribuido esta experiencia a, de algún modo, mejorar tu propia técnica como guionista? ¿Qué aspectos de sus respectivos estilos –y del proceso creativo compartido– te resultaron más enriquecedores o llamativos?

Sean Murphy.- A quien más admiro es a Scott Snyder, porque ejemplifica perfectamente cómo quiero escribir. Por encima de todo, los guiones de Scott son claros, absorbentes y cada entrega tiene al menos un momento de los que realmente merecen la pena. Cuando escribo, eso es exactamente lo que también intento conseguir.

ECC.- Como apuntas en el prólogo de esta obra, su origen se remonta más de 10 años en el tiempo, y ha ido mutando, evolucionando y creciendo conforme lo hacías tú mismo desde una perspectiva tanto artística como personal. Siendo un trabajo tan ligado a experiencias personales y que ha rondado tu cabeza durante tanto tiempo, ¿qué sentiste cuando terminaste la última página de Punk Rock Jesus? ¿El resultado final difiere mucho del que tenías en mente en un primer momento?

Sean Murphy.-
Me llevó un par de meses tras finalizar Punk Rock Jesus antes de que realmente tuviera la sensación de que estaba terminado. Para mi, el proceso fue así: terminar el dibujo, afinar el guion, enviarlo, editarlo, comprobar la copia, terminar el número entero, comprar el cómic en una librería, leerlo para analizarlo, leer unas cuantas reseñas, prestar atención a las opiniones de la gente a través de Twitter y, ENTONCES, dar por terminado el proyecto.

No estoy seguro de que Punk Rock Jesus pudiera haber salido adelante sin Karen [N. del t.: Karen Berger, editora del proyecto]. Habría requerido más tiempo, seguramente, pero dudo que el resultado hubiera sido mejor. Estoy satisfecho al 100%.

ECC.- Simplificando la trama, podríamos decir que Punk Rock Jesus versa sobre las consecuencias de que una gran corporación clone a Jesucristo a partir de restos de ADN hallados en la Sábana Santa de Turín, para convertirlo en protagonista de un reality show. Partiendo del tratamiento de temas como la religión, el ateísmo, las organizaciones terroristas, el papel de los medios de comunicación y la sociedad de consumo, imaginamos que eras plenamente consciente de que éste era un proyecto conceptualmente muy controvertido. ¿Te resultó complicado encontrar el tono y la estructura adecuada para abordar estos asuntos?

Sean Murphy.- Lo que me ayudó a conducir este cómic por esos desafíos fueron los personajes. Por ejemplo, incluso aunque no seas católico, creo que los lectores religiosos pueden comprender a Thomas muy bien: su estricta necesidad de encontrar respuestas de fe en un mundo que se está volviendo más y más confuso es un desafío para cada persona religiosa. Y hubo otros personajes que eran vagamente religiosos, como Tim, el asistente de Thomas. Y la fe de Rebekah durante el desenlace de la obra es un tanto budista. La mayor parte de los tipos de fe están de algún modo representados por un personaje, todos agradables pero con puntos débiles. Tras percatarme de esta circunstancia, escribir este cómic me resultó mucho más sencillo.

ECC.- Aunque admites ser admirador del trabajo de autores como Mike Mignola, Kevin Nowlan o Rick Leonardi (entre otros), tu estilo gráfico tiene una gran personalidad, siendo inmediatamente reconocible. ¿Tal vez se debe al hecho de que, a la hora de desarrollar tu trazo, te inefluenciaron más historietistas tan diferentes como Jorge Zaffino, Sergio Toppi o Bill Watterson? ¿Qué aspectos de sus respectivos estilos llamaron tu atención hasta el punto de tomarlos como referentes?

Sean Murphy.- Has nombrado a mis tres autores preferidos, así que esto es lo que he aprendido de sus estilos: Zaffino me dice que el arte no tiene por qué ser limpio para ser efectivo. El arte más interesante, en mi opinión, es aquel que encuentra el equilibrio entre caos y control. Es bueno asumir riesgos, y si la cosa no sale bien, seguir adelante e intentar hacerlo mejor la próxima vez. Toppi me dice que los garabatos pueden terminar convirtiéndose en obras maestras. Y que el diseño no tiene por qué ser complejo para ser bueno; la simplicidad es igual de atractiva. Y que cuando te estanques, garabatea un poco más. Y Watterson me dice que el arte del cómic es caricaturesco. En ocasiones los personajes actúan de forma ridícula, así que está bien dibujarlos de ese modo.

ECC.- Uno de los rasgos más notables y potentes de tu estilo es el entintado. ¿Cómo varía el mismo en función de trabajar en color o en blanco y negro? En los extras del recopilatorio de Punk Rock Jesus podemos ver una página en la que probaste la aplicación de aguadas. ¿Por qué finalmente descartaste esta opción?

Sean Murphy.- Aunque bonitas y efectivas, utiizar aguadas requería demasiado tiempo, así que en lugar de utilizar dicha técnica para los flashbacks, recurrí al entintado tradicional. Probablemente, Punk Rock Jesus tiene un 30 % más de líneas en sus páginas debido a la ausencia de color. Los cielos nocturnos no pueden ser blancos, por ejemplo, muchas de las secuencias oscuras tuvieron que ser planificadas cuidadosamente. Pero me encantó asumir el reto.

ECC.- Los lectores de ECC Ediciones también han tenido ocasión de disfrutar otros trabajos tuyos, como Hellblazer: Ciudad de demonios. Un personaje, John Constantine, a quien ya conocías gracias a la historia Newcastle Calling (Hellblazer núms. 245-246 USA), escrita por Jason Aaron. ¿Qué diferencias encontraste entre ambas aproximaciones al personaje? ¿Cuál de los muchos dibujantes que han pasado por la colección crees que ha dejado un recuerdo más perdurable?

Sean Murphy.-  Nunca había leído Hellblazer, así que no hubo ninguna influencia en mi interpretación del personaje. Cuando aprendí cosas sobre él, lo vi más oscuro, anguloso y estilizado que tal y como lo habían dibujado otros autores. La colección no era el principal punto de interés de Vertigo, por aquel entonces, así que como en realidad nadie me estaba prestando atención, decidí intentar algo complemente diferente para el personaje. Ropa, pelo y cara distintos a como se habían mostrado en el pasado. Esperé hasta que estuvo terminado el primer número para enseñárselo a la gente de Vertigo, que finalmente no me pidieron que cambiara nada, ya que habría implicado rehacer un montón de páginas.

ECC.- También te encargaste del apartado gráfico de American Vampire: Selección Natural. ¿Te sentiste cómodo abordando y ampliando esta mitología, inicialmente desarrollada por Rafael Albuquerque?

Sean Murphy.- Totalmente. Al tratarse de una miniserie aparte, eso hizo que me resultara mucho más fácil tratar de hacerla mía.

ECC.- La experiencia debió resultar especialmente positiva, ya que has repetido colaboración con Scott Snyder en la recientemente estrenada The Wake, serie limitada de 10 números. ¿Qué nos puedes comentar acerca de este proyecto?

Sean Murphy.- Adoro trabajar para DC: siempre me han cuidado mucho. Y especialmente, me encanta Vertigo, porque no estoy seguro de ser una opción adeciada para los cómics más mainstream del Universo DC. Además, Vertigo tiene más guiones en los que estoy interesado.

ECC.- Ya para finalizar, nos gustaría que nos comentaras qué proyectos de futuro tienes en mente, una vez finalices The Wake. ¿Volver a desarrollar un proyecto como autor completo, tal vez?

Sean Murphy.- No puedo decirlo :)

[Foto: Mike Jara Photography].