En octubre de 2012, durante el transcurso de la New York Comic Con, los responsables de la línea Vertigo anunciaron el nuevo proyecto que reuniría a dos de los talentos más pujantes de la editorial: Scott Snyder y Sean Murphy. El primero, avalado por el éxito de American Vampire y convertido en guionista de referencia de DC Comics gracias a su trabajo al frente de Batman; con el primer capítulo del arco argumental La muerte de la familia recién llegado a las librerías especializadas y cuando todavía resonaban los ecos del anuncio de Superman: El Hombre de Acero, colección en la que formaría equipo creativo con Jim Lee. El segundo, reconocido como uno de los dibujantes del momento, con trabajos tan interesantes en su bibliografía como Joe el Bárbaro, Punk Rock Jesus —esta última como autor completo— o American Vampire: Selección natural.
Fue precisamente dicha serie limitada la que propició que, más allá de un entendimiento creativo evidente, la colaboración deviniera en amistad entre ambos autores. De ahí la voluntad de desarrollar un proyecto común en cuanto sus apretadas agendas lo permitieran. Pero para ello, debían encontrar un terreno de intereses comunes sobre el que cimentar la obra; misión sencilla, teniendo en cuenta la pasión compartida por los géneros de ciencia ficción, aventura y terror.
Estructurada en forma de maxiserie de 10 entregas, El resurgir (The Wake, en su edición original) representó la materialización de más de un año de trabajo, durante el cual Snyder y Murphy cocrearon una obra que según la editorial estaba ambientada "en vastos paisajes oceánicos, claustrofóbicos a la par que bellos, donde se produce un descubrimiento que revelará una mitología secreta”. Abundando en explicaciones, el propio Snyder señaló que se trataba de una historia "épica de ciencia ficción y terror submarino, con elementos de narración post-apocalíptica" que ofrecería a los lectores "nuevos héroes y monstruos". Finalmente, el 29 de mayo de 2013 los lectores americanos tuvieron ocasión de leer la primera entrega de El resurgir, adentrándose en la historia protagonizada por Lee Archer: bióloga marina cuyos servicios son requeridos por el Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos con motivo de un sorprendente descubrimiento en las profundidades del Círculo Polar Ártico. Un hallazgo que bien podría desentrañar misterios ocultos relacionados con la mitología y el folclore marinos, el origen de la humanidad... y su descorazonador futuro.
La génesis de El resurgir tiene mucho que ver con la fascinación que Scott Snyder siempre ha sentido por el mar: desde su infancia, mostró un vivo interés por los descubrimientos oceánicos, los barcos hundidos y, muy especialmente, la historia del Titanic y la localización del mítico transatlántico. "Todo lo relacionado con el mar, con los misterios que este oculta y con los vastos espacios todavía inexplorados: escenarios en los que siempre he querido ambientar una historia de terror y ciencia ficción". El popular guionista tenía claro que el detonante argumental guardaría relación con la aparición de una criatura cuya existencia revelaría "un amplio abanico de misterios sobre de dónde venimos y qué más se oculta ahí abajo". Y a la hora de definir la ambientación acuática y el mundo futuro en que se desarrolla buena parte de la historia, sabía que Sean Murphy era el dibujante más adecuado, perfecto para "incorporar elementos al contexto y al trasfondo de la historia para que se materializara el mundo que debíamos construir, haciéndolo increíblemente real y añadiendo grandes aportaciones a la historia y a la caracterización de los personajes"
La colaboración fue especialmente fluida, y Murphy se encontró con guiones claros pero que al mismo tiempo le dejaban espacio para interpretar y enriquecer la historia con propuestas de su cosecha que trascendían el apartado gráfico. "Lanzaba ideas a Scott y normalmente se las apañaba para deslizarlas en los guiones; él tenía objetivos claros en mente, pero no fue rígido en absoluto". Ambos hablaron con frecuencia sobre nociones visuales que querían plasmar en las páginas del cómic, compartiendo documentación e investigación hasta dar lugar a una retroalimentación que el dibujante encontró especialmente reconfortante: "Concer las opiniones de Scott fue genial, pero también el hecho de que fuera realmente abierto sobre mi interpretación de sus guiones. Rara vez no terminamos estando de acuerdo en el modo de manejar partes de la historia".
Tal y como sucediera en el caso de American Vampire: Selección natural, el entendimiento se reflejó en las páginas de El resurgir, traduciéndose en una cálida aceptación por parte de los lectores. Pero también en una entusiasta respuesta de la crítica, que reconoció su trabajo con los Premios Eisner 2014 a la mejor serie limitada y al mejor dibujante/entintador: broche de oro al recorrido de una obra que por fin pueden disfrutar los lectores españoles a través de un tomo que recopila la obra de forma íntegra, disponible desde el 29 de octubre. Os animamos a sumergiros en las profundidades del mar en compañía de dos de los autores más destacados de la industria del cómic. Estamos convencidos de que disfrutaréis y el viaje... ¡y descubriréis aterradoras sorpresas!
Fue precisamente dicha serie limitada la que propició que, más allá de un entendimiento creativo evidente, la colaboración deviniera en amistad entre ambos autores. De ahí la voluntad de desarrollar un proyecto común en cuanto sus apretadas agendas lo permitieran. Pero para ello, debían encontrar un terreno de intereses comunes sobre el que cimentar la obra; misión sencilla, teniendo en cuenta la pasión compartida por los géneros de ciencia ficción, aventura y terror.
Estructurada en forma de maxiserie de 10 entregas, El resurgir (The Wake, en su edición original) representó la materialización de más de un año de trabajo, durante el cual Snyder y Murphy cocrearon una obra que según la editorial estaba ambientada "en vastos paisajes oceánicos, claustrofóbicos a la par que bellos, donde se produce un descubrimiento que revelará una mitología secreta”. Abundando en explicaciones, el propio Snyder señaló que se trataba de una historia "épica de ciencia ficción y terror submarino, con elementos de narración post-apocalíptica" que ofrecería a los lectores "nuevos héroes y monstruos". Finalmente, el 29 de mayo de 2013 los lectores americanos tuvieron ocasión de leer la primera entrega de El resurgir, adentrándose en la historia protagonizada por Lee Archer: bióloga marina cuyos servicios son requeridos por el Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos con motivo de un sorprendente descubrimiento en las profundidades del Círculo Polar Ártico. Un hallazgo que bien podría desentrañar misterios ocultos relacionados con la mitología y el folclore marinos, el origen de la humanidad... y su descorazonador futuro.
La génesis de El resurgir tiene mucho que ver con la fascinación que Scott Snyder siempre ha sentido por el mar: desde su infancia, mostró un vivo interés por los descubrimientos oceánicos, los barcos hundidos y, muy especialmente, la historia del Titanic y la localización del mítico transatlántico. "Todo lo relacionado con el mar, con los misterios que este oculta y con los vastos espacios todavía inexplorados: escenarios en los que siempre he querido ambientar una historia de terror y ciencia ficción". El popular guionista tenía claro que el detonante argumental guardaría relación con la aparición de una criatura cuya existencia revelaría "un amplio abanico de misterios sobre de dónde venimos y qué más se oculta ahí abajo". Y a la hora de definir la ambientación acuática y el mundo futuro en que se desarrolla buena parte de la historia, sabía que Sean Murphy era el dibujante más adecuado, perfecto para "incorporar elementos al contexto y al trasfondo de la historia para que se materializara el mundo que debíamos construir, haciéndolo increíblemente real y añadiendo grandes aportaciones a la historia y a la caracterización de los personajes"
La colaboración fue especialmente fluida, y Murphy se encontró con guiones claros pero que al mismo tiempo le dejaban espacio para interpretar y enriquecer la historia con propuestas de su cosecha que trascendían el apartado gráfico. "Lanzaba ideas a Scott y normalmente se las apañaba para deslizarlas en los guiones; él tenía objetivos claros en mente, pero no fue rígido en absoluto". Ambos hablaron con frecuencia sobre nociones visuales que querían plasmar en las páginas del cómic, compartiendo documentación e investigación hasta dar lugar a una retroalimentación que el dibujante encontró especialmente reconfortante: "Concer las opiniones de Scott fue genial, pero también el hecho de que fuera realmente abierto sobre mi interpretación de sus guiones. Rara vez no terminamos estando de acuerdo en el modo de manejar partes de la historia".
Tal y como sucediera en el caso de American Vampire: Selección natural, el entendimiento se reflejó en las páginas de El resurgir, traduciéndose en una cálida aceptación por parte de los lectores. Pero también en una entusiasta respuesta de la crítica, que reconoció su trabajo con los Premios Eisner 2014 a la mejor serie limitada y al mejor dibujante/entintador: broche de oro al recorrido de una obra que por fin pueden disfrutar los lectores españoles a través de un tomo que recopila la obra de forma íntegra, disponible desde el 29 de octubre. Os animamos a sumergiros en las profundidades del mar en compañía de dos de los autores más destacados de la industria del cómic. Estamos convencidos de que disfrutaréis y el viaje... ¡y descubriréis aterradoras sorpresas!