Todo viaje tiene un principio... y un final. Y este mes debemos despedir a la leyenda viva que se ha estado ocupando de esta colección durante los últimos números: Dan Jurgens. Gracias a él, las páginas de Superman se han llenado del mejor sabor a cómic clásico y hemos disfrutado de una magnífica historia de superhéroes a la antigua usanza, con Superman haciendo frente a peligrosos villanos que han puesto a prueba el porqué del "Super" que lleva su nombre.
Pero todavía nos resta saber cuál va a ser la última amenaza a la que Jurgens enfrente a Superman antes de dejar paso al siguiente guionista, a quien ya conocemos en este mismo número. Hablamos de Scott Lobdell, responsable hasta el momento de la colección Superboy (de la que podéis encontrar más información en el volumen recopilatorio Superman: Año Cero) y que da ahora el salto a las páginas de Superman dispuesto a brindarnos –junto con el dibujante Kenneth Rocafort– próximos acontecimientos que prometen ser impresionantes.
Sin desvelar nada de lo que nos espera en los próximos meses, lo que sí podemos decir es que Lobdell no es un autor que pase de puntillas por las colecciones en las que trabaja, así que viene para quedarse una buena temporada con Superman. Durante el tiempo que lleve las riendas del personaje, vamos a poder ver grandes cambios que serán, según el guionista, tan impredecibles como la vida misma: “Me gustan las historias en las que los personajes reflejan lo espontáneo e impredecible de la vida real”, afirma Lobdell. “Imagínate lo aburrido que sería si te sentaras y me dijeras exactamente cómo va a ser tu vida durante los próximos 12 meses; a quién vas a conocer, qué van a decir, cómo van a actuar, qué superpoderes emplearás para derrotar a los villanos... Estoy decidido a daros un Superman que os sorprenda en cada número.”
Pero ¿qué ha atraído a Lobdell de Superman para hacerse cargo de él precisamente en estos momentos? “Me gusta que sea único –asegura–. El hecho es que ha ido a caer en un planeta con seis billones de personas, pero jamás será uno de ellos. ¿Te das cuenta de lo asombroso que es eso? Yo quizá hubiera volado al espacio a buscar un planeta con gente como yo, o al menos con gente que no dependiera tanto de lo que yo hiciera. Pero no Kal-El. Él está ahí día tras día arriesgando su vida por unas personas que tan pronto lo ponen en un pedestal como se mantienen a distancia de él.”
Además, en los próximos números veremos que Superman se va a desprender de esa “perfección” que muchas veces se le ha atribuido como una de sus lacras: “Se dice que los lectores ven a Superman ‘demasiado perfecto’, que siempre toma la decisión correcta. Pero la verdad es que cada decisión tiene sus consecuencias, y cuando todas tus decisiones son superdecisiones, entonces tienen superconsecuencias”, explica Lobdell.
Así pues, estamos ante un Superman contemporáneo, pero fiel a su estándar, y poderoso, pero no omnipotente. Un Hombre de Acero totalmente enmarcado dentro de los nuevos cánones que han comenzado con el nUDC y dispuesto a afrontar grandes cambios y retos personales. Y el primero de ellos lo veremos ya el mes que viene, en lo que supondrá la confirmación de que el nuevo equipo creativo viene dispuesto a romper con todo y que para este nuevo Superman... ni siquiera el cielo es el límite.
Javier Olivares Tolosa
Pero todavía nos resta saber cuál va a ser la última amenaza a la que Jurgens enfrente a Superman antes de dejar paso al siguiente guionista, a quien ya conocemos en este mismo número. Hablamos de Scott Lobdell, responsable hasta el momento de la colección Superboy (de la que podéis encontrar más información en el volumen recopilatorio Superman: Año Cero) y que da ahora el salto a las páginas de Superman dispuesto a brindarnos –junto con el dibujante Kenneth Rocafort– próximos acontecimientos que prometen ser impresionantes.
Sin desvelar nada de lo que nos espera en los próximos meses, lo que sí podemos decir es que Lobdell no es un autor que pase de puntillas por las colecciones en las que trabaja, así que viene para quedarse una buena temporada con Superman. Durante el tiempo que lleve las riendas del personaje, vamos a poder ver grandes cambios que serán, según el guionista, tan impredecibles como la vida misma: “Me gustan las historias en las que los personajes reflejan lo espontáneo e impredecible de la vida real”, afirma Lobdell. “Imagínate lo aburrido que sería si te sentaras y me dijeras exactamente cómo va a ser tu vida durante los próximos 12 meses; a quién vas a conocer, qué van a decir, cómo van a actuar, qué superpoderes emplearás para derrotar a los villanos... Estoy decidido a daros un Superman que os sorprenda en cada número.”
Pero ¿qué ha atraído a Lobdell de Superman para hacerse cargo de él precisamente en estos momentos? “Me gusta que sea único –asegura–. El hecho es que ha ido a caer en un planeta con seis billones de personas, pero jamás será uno de ellos. ¿Te das cuenta de lo asombroso que es eso? Yo quizá hubiera volado al espacio a buscar un planeta con gente como yo, o al menos con gente que no dependiera tanto de lo que yo hiciera. Pero no Kal-El. Él está ahí día tras día arriesgando su vida por unas personas que tan pronto lo ponen en un pedestal como se mantienen a distancia de él.”
Además, en los próximos números veremos que Superman se va a desprender de esa “perfección” que muchas veces se le ha atribuido como una de sus lacras: “Se dice que los lectores ven a Superman ‘demasiado perfecto’, que siempre toma la decisión correcta. Pero la verdad es que cada decisión tiene sus consecuencias, y cuando todas tus decisiones son superdecisiones, entonces tienen superconsecuencias”, explica Lobdell.
Así pues, estamos ante un Superman contemporáneo, pero fiel a su estándar, y poderoso, pero no omnipotente. Un Hombre de Acero totalmente enmarcado dentro de los nuevos cánones que han comenzado con el nUDC y dispuesto a afrontar grandes cambios y retos personales. Y el primero de ellos lo veremos ya el mes que viene, en lo que supondrá la confirmación de que el nuevo equipo creativo viene dispuesto a romper con todo y que para este nuevo Superman... ni siquiera el cielo es el límite.
Javier Olivares Tolosa