Tenéis ante vosotros el final de la historia que el guionista Kyle Higgins ha estado contando desde el inicio del nuevo Universo DC, precipitado por el imparable avance de Maldad eterna. Es en dicha miniserie donde presenciaréis ¿los últimos días de Nightwing?, y en Maldad eterna: Consecuencias donde conoceréis su destino definitivo. Pero Higgins ha desvelado cuáles eran sus planes de haber podido evitar este prematuro desenlace...

Por fin íbamos a conocer el motivo por el que Dick dejó de ser Robin, que no fue otro que perseguir a Tony Zucco, el asesino de sus padres, contraviniendo las órdenes de Batman. El mafioso apareció en Gotham para establecer contacto con su hija Sonia, y fue cazado por Dick, ya tras la identidad de Nightwing. Sin embargo, el criminal aparentemente murió de un ataque al corazón, dejando al héroe sin la satisfacción que buscaba.

Tras la revelación de que seguía vivo, la historia actual iba a ser muy diferente, mezclando la búsqueda de Zucco con la trama del asesino de enmascarados, quien descubriríamos que era Ghostwalker, compañero de Éter, el héroe de Chicago. Su familia había muerto a manos de delincuentes que habían descubierto su identidad secreta y él asesinó a los culpables, lo cual le llevó a enfrentarse a su propio mentor, a quien también quitó la vida. Consciente del daño que hacían las máscaras, tanto a él como a la ciudad, desde entonces asesinó a todo enmascarado que se cruzara en su camino. La historia culminaría en un enfrentamiento en que Nightwing salvaría a Zucco de Ghostwalker, tras el que Zucco sería absuelto del asesinato de los Grayson y se convertiría en el jefe del crimen de Chicago, con el asesino de héroes como mano ejecutora.

Pero tras este abrupto final eso ya nunca acontecerá, y ya solo nos queda ver qué le depara el futuro a Dick Grayson.

Sergio Robla

Artículo originalmente publicado como introducción de Nightwing núm. 7.