Hay orígenes tan impecables que son imposibles de mejorar. Tomemos el ejemplo de Halcón y Paloma. Hank y Don Hall eran hijos de un prominente juez. Un día descubrieron que un terrible criminal planeaba matar a su padre, así que decidieron emular a los Hermanos Hardy e intentaron detenerlo. El resultado fue nefasto. Los matones de turno capturaron a los jóvenes héroes y los dejaron encerrados. Ron se enfadó tanto que deseó tener el poder de escapar y… ¡de repente apareció una extraña voz y le concedió su deseo! Así nacieron los primeros Halcón y Paloma. Tras unos años combatiendo el crimen, Don murió y Dawn Granger ocupó su lugar. En el Nuevo Universo DC, esta historia prácticamente no ha sufrido modificaciones. Sencillamente se ha simplificado.
Aprovechando que La noche más oscura trajo de vuelta el statu quo de los Halcón y Paloma más queridos por los lectores, los últimos tebeos de estos héroes parecen la continuación de la miniserie que en 1988 lanzó al estrellato a estos irrepetibles personajes. No olvidemos que –a pesar de ser una creación de los años sesenta de Steve Sketes y del gran Steve Ditko– la primera colección regular de los hermanos Hall tuvo una existencia efímera, aunque ambos perdurarían en el tiempo gracias a su inclusión en los cómics de los Jóvenes Titanes. La muerte de Don en Crisis en Tierras Infinitas llamó la atención de todo el mundo. Poco después, la aparición de una nueva Paloma en la miniserie de los ochenta convirtió al dúo en toda una sensación. Eso sí, gran parte del mérito de aquello se debía a los espectaculares dibujos de Rob Liefeld, un artista que también saltó a la fama gracias a esos inolvidables episodios y que, además, se ha ocupado de los lápices de la actual cabecera.
Aunque suene contradictorio, el retorno a los orígenes ha propiciado decenas de cambios y sorpresas. Ahora hay que volver a definir la procedencia de la voz que les dio sus poderes. Se ha insinuado que todo esto tiene algo que ver con el dios Horus y con unos avatares que antaño poblaban el Universo DC. De hecho, se ha profetizado una guerra de avatares e incluso se han introducido dos más: Cóndor y Cisne. No obstante, el peligro más inminente proviene de Dawn. Y es que Paloma guarda oculto algo que puede enloquecer a Hank y que tiene que ver con una antigua relación entre Don y Dawn. Desgraciadamente no podemos desvelar el secreto de Paloma porque la chica solo se lo ha confesado a Deadman. A los demás nos tiene en ascuas.
Enrique Ríos
Aprovechando que La noche más oscura trajo de vuelta el statu quo de los Halcón y Paloma más queridos por los lectores, los últimos tebeos de estos héroes parecen la continuación de la miniserie que en 1988 lanzó al estrellato a estos irrepetibles personajes. No olvidemos que –a pesar de ser una creación de los años sesenta de Steve Sketes y del gran Steve Ditko– la primera colección regular de los hermanos Hall tuvo una existencia efímera, aunque ambos perdurarían en el tiempo gracias a su inclusión en los cómics de los Jóvenes Titanes. La muerte de Don en Crisis en Tierras Infinitas llamó la atención de todo el mundo. Poco después, la aparición de una nueva Paloma en la miniserie de los ochenta convirtió al dúo en toda una sensación. Eso sí, gran parte del mérito de aquello se debía a los espectaculares dibujos de Rob Liefeld, un artista que también saltó a la fama gracias a esos inolvidables episodios y que, además, se ha ocupado de los lápices de la actual cabecera.
Aunque suene contradictorio, el retorno a los orígenes ha propiciado decenas de cambios y sorpresas. Ahora hay que volver a definir la procedencia de la voz que les dio sus poderes. Se ha insinuado que todo esto tiene algo que ver con el dios Horus y con unos avatares que antaño poblaban el Universo DC. De hecho, se ha profetizado una guerra de avatares e incluso se han introducido dos más: Cóndor y Cisne. No obstante, el peligro más inminente proviene de Dawn. Y es que Paloma guarda oculto algo que puede enloquecer a Hank y que tiene que ver con una antigua relación entre Don y Dawn. Desgraciadamente no podemos desvelar el secreto de Paloma porque la chica solo se lo ha confesado a Deadman. A los demás nos tiene en ascuas.
Enrique Ríos