Eccediciones
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Del pasado al futuro

El título del volumen La Guerra de los Green Lanterns: Consecuencias explica perfectamente cuál es su objetivo: abordar los sucesos inmediatamente posteriores a lo ocurrido en Green Lantern núm. 20, el último de la colección protagonizada por Hal Jordan. El antiguo piloto de pruebas ya no es agente de los Guardianes del Universo, cuyo Cuerpo ha quedado literalmente devastado por lo ocurrido en dicho cuaderno. En estas páginas, los guionistas Tony Bedard y Peter J. Tomasi exploran el estado de la franquicia después de la gran batalla contra Krona en los episodios con que concluyen las series originales Green Lantern Corps y Green Lantern: Emerald Warriors. Y también, por supuesto, en la miniserie War of the Green Lanterns: Aftermath, que sirve para cubrir el hueco dejado por la colección principal, cuyos autores, Geoff Johns y Doug Mahnke, regresarán muy pronto con nuevas aventuras de Green Lantern... sea quien sea.

Una de las tramas principales de La Guerra de los Green Lanterns: Consecuencias es, como no podía suceder de otro modo, la tensa relación que mantiene Soranik Natu con su padre, Sinestro, el renegado que terminó siendo líder de los Sinestro Corps y, en consecuencia, uno de los peores enemigos de los portadores del anillo verde. La korugariana nunca ha llevado bien sus raíces, lo cual ha terminado afectando a su romance con Kyle Rayner, que también tiene una buena dosis de protagonismo en estas páginas. De hecho, el idilio ha terminado tan mal que el terrícola se ve obligado a volver a su planeta natal como preparación de la nueva serie que ya está protagonizando en Estados Unidos, Green Lantern: New Guardians.

La situación de Soranik y Kyle ocupa buena parte del penúltimo episodio de Green Lantern Corps, y sirve como excusa para el regreso de una vieja conocida de los seguidores de la franquicia. Se trata de Miri Riam, la Zafiro Estelar que crearon Tomasi y Patrick Gleason en la colección Green Lantern Corps. Su origen, como el de tantas otras compañeras, es trágico; no en vano, su marido murió a manos de Mongul durante la luna de miel, lo cual la convirtió en el miembro perfecto del grupo al que ahora pertenece, cuya visión del amor se distorsiona en muchas ocasiones y llega a confundirse con la obsesión. Eso sí, Miri nunca ha sucumbido a la luz violeta y la ha controlado desde el principio, lo cual le ha permitido, por ejemplo, participar en la batalla que se libró en Oa durante La noche más oscura. Fue entonces cuando volvió a verse las caras con su peor enemiga, Kryb, la horripilante integrante de los Sinestro Corps que robaba a los bebés de los Green Lanterns para criarlos en aquella suerte de jaula repulsiva que llevaba adosada a su columna vertebral.

Otro de los invitados especiales de este volumen es el incombustible Batman, personaje que no necesita ninguna presentación. El protector de Gotham City jamás ha aceptado del todo a los portadores de esos anillos que tanto brillan y que tanto delatan la posición de un hombre acostumbrado a moverse entre sombras. Pero en el caso de Guy Gardner, con quien comparte aventura en esta ocasión, la animadversión siempre ha sido más personal que profesional. Recordemos que su rivalidad se remonta a finales de los años 80, cuando ambos protagonizaban escenas de bronca constante en la colección de la Liga de la Justicia Internacional orquestada por un Keith Giffen en estado de gracia. En concreto, el episodio del puñetazo (que dejó a Guy medio tonto durante un buen puñado de entregas) es uno de los más recordados de aquella época. La pareja ha coincidido mucho desde los tiempos de aquella Liga, pero ninguno de los dos ha olvidado todavía un episodio que, para Guy, fue la mayor humillación a que lo hayan sometido. Y eso que, en este volumen, tiene ocasión de hacer el ridículo durante cierta misión de rescate.

El no muy feliz reencuentro entre Gardner y el Caballero Oscuro se produce en el último episodio correspondiente a Green Lantern: Emerald Warriors, que, igual que Green Lantern Corps, no cuenta con su dibujante habitual. Y es que, a mediados de 2011, tanto Fernando Pasarín como Tyler Kirkham tuvieron que dejar estos capítulos en manos de otros autores para empezar a dedicarse en exclusiva a la que sería su siguiente asignación: las series hermanas de Green Lantern, una vez más. ¿Para qué cambiar lo que funciona bien? Ambos regresarán muy pronto como parte del equipo creativo de la franquicia dentro de “The New 52”. Las aventuras de nuestros queridos protagonistas no empezarán de cero, como sí sucederá en otros casos, y algunas de las tramas que vemos en este volumen tendrán una continuación directa a partir de mayo. Y es que seguro que la conclusión del segundo capítulo de La Guerra de los Green Lanterns: Consecuencias nos habrá dejado con muchas preguntas. ¿Qué pasará con Ganthet? ¿Y con el regalo que recibe Atrocitus? ¿Qué se proponen los Guardianes? ¿Y cómo encajará Hal Jordan que lo hayan destituido? Por suerte, falta muy poco para conocer las respuestas de la mano de todos los autores que nos han fascinado durante los últimos años.

 

Fran San Rafael

Artículo incluido en el volumen La Guerra de los Green Lanterns: Consecuencias