El canadiense Jeff Lemire ha convertido Animal Man en una de las lecturas más recomendables del Nuevo Universo DC. Durante 29 entregas, la serie se ha centrado en las vivencias de Buddy Baker como delegado del poder del Rojo (espacio que aglutina la esencia de toda la fauna del planeta). La historia también ha girado en torno al precario equilibrio existente entre las fuerzas del Rojo, el Verde y la Putrefacción. Este equilibrio inestable conlleva toda clase de maniobras para desnivelar la balanza en favor de un bando u otro. Pero, sobre todo, la serie ha puesto el foco en el entorno familiar del protagonista, desgarrado por el asesinato de su primogénito.
La muerte de Cliff Baker marcó un antes y un después en la trayectoria del protagonista. Además, señaló una línea divisoria entre los dos grandes arcos argumentales de que consta la serie. Los episodios que engloba este volumen pertenecen al segundo (y último) arco, y ponen el broche de oro a una de las etapas más importantes en la historia reciente del personaje. Bellamente dibujadas por artistas como Steve Pugh, Rafael Albuquerque, Francis Portela, Travel Foreman o el propio Lemire, estas páginas están inmersas en una atmósfera guerrera. La que impone el asalto del Hermano Sangre al reino del Rojo y al consejo de tótems que lo preside. Sin embargo, bajo ese armazón épico se desarrolla un relato de naturaleza más íntima: la refundación del clan Baker.
Una vez concluida esta historia, Buddy Baker estará listo para sumarse a las filas de la Liga de la Justicia Unida. A su espalda deja una serie que ha alcanzado por méritos propios la categoría de cómic de culto. Con ella, Jeff Lemire ha firmado su obra más ambiciosa hasta la fecha en el campo de los superhéroes. Una obra de aprendizaje que sitúa a su autor entre las estrellas emergentes en el firmamento del género.
Jorge García
Artículo publicado originalmente como introducción de Animal Man núm. 4.
La muerte de Cliff Baker marcó un antes y un después en la trayectoria del protagonista. Además, señaló una línea divisoria entre los dos grandes arcos argumentales de que consta la serie. Los episodios que engloba este volumen pertenecen al segundo (y último) arco, y ponen el broche de oro a una de las etapas más importantes en la historia reciente del personaje. Bellamente dibujadas por artistas como Steve Pugh, Rafael Albuquerque, Francis Portela, Travel Foreman o el propio Lemire, estas páginas están inmersas en una atmósfera guerrera. La que impone el asalto del Hermano Sangre al reino del Rojo y al consejo de tótems que lo preside. Sin embargo, bajo ese armazón épico se desarrolla un relato de naturaleza más íntima: la refundación del clan Baker.
Una vez concluida esta historia, Buddy Baker estará listo para sumarse a las filas de la Liga de la Justicia Unida. A su espalda deja una serie que ha alcanzado por méritos propios la categoría de cómic de culto. Con ella, Jeff Lemire ha firmado su obra más ambiciosa hasta la fecha en el campo de los superhéroes. Una obra de aprendizaje que sitúa a su autor entre las estrellas emergentes en el firmamento del género.
Jorge García
Artículo publicado originalmente como introducción de Animal Man núm. 4.