“Es una historia épica”, así definió el guionista Mike Carey la serie limitada The Unwritten: Apocalypse en una entrevista para el sitio web especializado en historieta CBR. En esa misma entrevista, el británico desveló que la serie iba a constar de 12 episodios agrupados en tres arcos argumentales sucesivos, el último de los cuales —a modo de clímax narrativo— desvelaría el destino de Tom (y Tommy) Taylor. ECC ha recopilado en cinco volúmenes los episodios del 25 al 54 de la primera etapa. Ahora reúne en dos tomos el grand finale, un desenlace dramático a la altura de una obra monumental.
A grandes rasgos, The Unwritten es un cómic de fantasía que nació como un homenaje al mundo de la creación literaria. En su interior, Mike Carey y el dibujante Peter Gross se lanzaron a cartografiar de forma minuciosa los reinos de la ficción narrativa. Esta cabecera seguía los pasos de Lucifer, obra previa del equipo, que se caracterizaba, entre otras virtudes, por la proliferación de escenarios y personajes. Circunscrita inicialmente al universo de un único protagonista, la colección del monarca infernal desbordó ampliamente ese límite y se expandió por multitud de mundos imaginarios. The Unwritten lleva al extremo esa multiplicación. Y es que el sujeto de la obra no es un personaje o un mundo, sino un campo más vasto y ambicioso. Como Alan Moore y Kevin O’Neill en La Liga de los Hombres Extraordinarios, Mike Carey y Peter Gross convirtieron la ficción literaria —en su sentido más amplio— en el auténtico motor de The Unwritten, primero, y The Unwritten: Apocalypse, después.
El protagonista de la serie es Tom Taylor, hijo de un célebre escritor de novelas juveniles de fantasía protagonizadas por un mago llamado Tommy Taylor (obviamente inspirado en su unigénito). Pero la irrealidad irrumpe en la existencia de Tom complicándole la vida a él y a sus conocidos. Es el inicio de una odisea que conduce al personaje a visitar lugares que son tópicos literarios desde hace siglos, como el infierno o el interior de una ballena. En las páginas de The Unwritten, la cultura clásica y la popular se dan la mano mezclando creaciones literarias de Charles Dickens o de Herman Melville con vampiros, zombis y superhéroes. No en vano, Carey fue profesor de lengua y literatura. Y esta serie le proporcionó el vehículo adecuado para explotar su bagaje cultural sin caer en alardes de erudición. Y, sobre todo, le permitió hacer un cómic en su sentido más amplio. Peter Gross, bromeando, afirmó que los lectores podían encontrar en The Unwritten los fenómenos editoriales más populares en el cómic actual: un crossover (recopilado en el volumen Las Fábulas no escritas de The Unwritten), una novela gráfica (Tommy Taylor and the Ship that Sank Twice) y un relanzamiento (The Unwritten: Apocalypse).
El crossover con la serie Fábulas fue todo un éxito y atrajo un público nuevo a la colección. La editora de Vertigo Shelly Bond aprovechó la circunstancia para plantear a Carey y a Gross la posibilidad de relanzar el título con nuevo rótulo y nueva numeración. Se trataba, por tanto, de un guiño destinado a seducir a los lectores de reciente incorporación. Pero también respondía a una necesidad argumental: la de retomar el hilo de la historia allí donde lo había dejado Las Fábulas no escritas de The Unwritten. En términos dramáticos, el primer volumen de la serie representa los dos primeros actos de una obra teatral. The Unwritten: Apocalypse encarna el último acto.
Un acto que arranca con Tom Taylor sobreviviendo al holocausto planteado en el volumen anterior. A partir de ahí, la serie sitúa al joven héroe ante una misión delicada y lo rodea de un plantel maravilloso de personajes secundarios. El resultado es una epopeya que se desarrolla en una atmósfera caótica, milenarista y crepuscular. Este telón de fondo apocalíptico es el lugar adecuado para que Carey demuestre su inclinación por los géneros literarios más variados. Para empezar, por la fábula (a la que rinde un divertido homenaje en las primeras páginas de esta recopilación). Pero, sobre todo, a la épica y a todos los subgéneros derivados de ella, desde las modernas historias de zombis a esas ucronías bélicas donde las tropas nazis invaden Gran Bretaña. Como todos esos relatos (cuyo modelo último es La Iliada de Homero), The Unwritten: Apocalyse se ramifica en una proliferación incesante de acciones y personajes memorables que culmina en un clímax de proporciones colosales. El resultado es una obra monumental —por extensión y profundidad— que da apariencia de verosimilitud a un mundo fundado en fantasías literarias. Un hermoso espejismo firmado por dos autores en estado de gracia.
Jorge García
Artículo publicado originalmente en las páginas de The Unwritten núm. 10: Historias de guerra ¡Ya disponible en vuestro punto de venta habitual!
Previa de The Unwritten núm. 10: Historias de guerra
A grandes rasgos, The Unwritten es un cómic de fantasía que nació como un homenaje al mundo de la creación literaria. En su interior, Mike Carey y el dibujante Peter Gross se lanzaron a cartografiar de forma minuciosa los reinos de la ficción narrativa. Esta cabecera seguía los pasos de Lucifer, obra previa del equipo, que se caracterizaba, entre otras virtudes, por la proliferación de escenarios y personajes. Circunscrita inicialmente al universo de un único protagonista, la colección del monarca infernal desbordó ampliamente ese límite y se expandió por multitud de mundos imaginarios. The Unwritten lleva al extremo esa multiplicación. Y es que el sujeto de la obra no es un personaje o un mundo, sino un campo más vasto y ambicioso. Como Alan Moore y Kevin O’Neill en La Liga de los Hombres Extraordinarios, Mike Carey y Peter Gross convirtieron la ficción literaria —en su sentido más amplio— en el auténtico motor de The Unwritten, primero, y The Unwritten: Apocalypse, después.
El protagonista de la serie es Tom Taylor, hijo de un célebre escritor de novelas juveniles de fantasía protagonizadas por un mago llamado Tommy Taylor (obviamente inspirado en su unigénito). Pero la irrealidad irrumpe en la existencia de Tom complicándole la vida a él y a sus conocidos. Es el inicio de una odisea que conduce al personaje a visitar lugares que son tópicos literarios desde hace siglos, como el infierno o el interior de una ballena. En las páginas de The Unwritten, la cultura clásica y la popular se dan la mano mezclando creaciones literarias de Charles Dickens o de Herman Melville con vampiros, zombis y superhéroes. No en vano, Carey fue profesor de lengua y literatura. Y esta serie le proporcionó el vehículo adecuado para explotar su bagaje cultural sin caer en alardes de erudición. Y, sobre todo, le permitió hacer un cómic en su sentido más amplio. Peter Gross, bromeando, afirmó que los lectores podían encontrar en The Unwritten los fenómenos editoriales más populares en el cómic actual: un crossover (recopilado en el volumen Las Fábulas no escritas de The Unwritten), una novela gráfica (Tommy Taylor and the Ship that Sank Twice) y un relanzamiento (The Unwritten: Apocalypse).
El crossover con la serie Fábulas fue todo un éxito y atrajo un público nuevo a la colección. La editora de Vertigo Shelly Bond aprovechó la circunstancia para plantear a Carey y a Gross la posibilidad de relanzar el título con nuevo rótulo y nueva numeración. Se trataba, por tanto, de un guiño destinado a seducir a los lectores de reciente incorporación. Pero también respondía a una necesidad argumental: la de retomar el hilo de la historia allí donde lo había dejado Las Fábulas no escritas de The Unwritten. En términos dramáticos, el primer volumen de la serie representa los dos primeros actos de una obra teatral. The Unwritten: Apocalypse encarna el último acto.
Un acto que arranca con Tom Taylor sobreviviendo al holocausto planteado en el volumen anterior. A partir de ahí, la serie sitúa al joven héroe ante una misión delicada y lo rodea de un plantel maravilloso de personajes secundarios. El resultado es una epopeya que se desarrolla en una atmósfera caótica, milenarista y crepuscular. Este telón de fondo apocalíptico es el lugar adecuado para que Carey demuestre su inclinación por los géneros literarios más variados. Para empezar, por la fábula (a la que rinde un divertido homenaje en las primeras páginas de esta recopilación). Pero, sobre todo, a la épica y a todos los subgéneros derivados de ella, desde las modernas historias de zombis a esas ucronías bélicas donde las tropas nazis invaden Gran Bretaña. Como todos esos relatos (cuyo modelo último es La Iliada de Homero), The Unwritten: Apocalyse se ramifica en una proliferación incesante de acciones y personajes memorables que culmina en un clímax de proporciones colosales. El resultado es una obra monumental —por extensión y profundidad— que da apariencia de verosimilitud a un mundo fundado en fantasías literarias. Un hermoso espejismo firmado por dos autores en estado de gracia.
Jorge García
Artículo publicado originalmente en las páginas de The Unwritten núm. 10: Historias de guerra ¡Ya disponible en vuestro punto de venta habitual!
Previa de The Unwritten núm. 10: Historias de guerra