Todos dan a Bruce Wayne por muerto y Dick Grayson, el Robin original, ha adoptado el papel de Batman. Su compañero es un psicópata de 10 años: el hijo real de Bruce. La ciudad necesita a sus héroes más que nunca, ahora que el crimen está adoptando un tono más macabro de lo normal con el grotesco creador de muñecotrónicos: Pyg. Pero más peligroso todavía es Capucha Roja, quien, junto a su compañera Scarlet, pretende equiparar los castigos con la gravedad de los crímenes y traer una justicia salvaje a las calles de Gotham. Sus violentos métodos han atraído una terrible nueva amenaza a Gotham… Flamenco, el asesino devorador de caras.