5 de septiembre del año 1229. La flota del rey Jaime I zarpa desde Salou, Cambrils y Tarragona. Más de ciento cincuenta embarcaciones transportan unos cuatro mil peones y cerca de mil caballeros. Su objetivo: conquistar la isla de Mallorca a los almohades.
En la hueste viaja Bernat de Santa Eugènia, señor de Torroella de Montgrí, dispuesto a entrar en combate cuando convenga para honrar y enriquecer su linaje.